sábado, 8 de diciembre de 2012

Capitulo 8"Guardaespaldas personal, osea pegado a tu culo"



CAPÍTULO 8
"Guardaespaldas personal, osea pegado a tu culo"
Se hizo un silencio absoluto en la habitación durante unos segundos.
- Le pueden dar mucho por culo a ese gilipollas –dijo Alba.
- Lo único que pretendía era meternos miedo –contestó Andrea.
- No os lo toméis a broma –dijo María.
- Nos lo tomamos enserio cariño -contestó Raquel acariciándole la mejilla –pero no vamos a temerle ahora, eso es lo que quiere y no.
- Pero… yo no quiero que os pase lo mismo –se le cortó la voz porque estaba a punto de llorar y las cuatro la abrazaron.
- No nos va a pasar –le aseguró Eleanor –ya verás cielo.
- Claro que no va a pasar –dijo Harry todo convencido –porque no os vamos a dejar solas –Raquel y Alba le miraron mal.
- ¿Y eso que quiere decir? –dijo la rubia.
- Que no os vais a quedar solas.
- ¿Así que ahora me vas a poner un guardaespaldas? –Le preguntó Raquel, Harry no contestó –ya, que te lo has creído, me se cuidar solita, simplemente hay que estar más pendiente y tener un buen espray de pimienta a mano, ya está –ni Andrea ni Eleanor habían abierto su boca porque la idea de tener a Liam y Louis detrás de sus respectivos culos, tampoco las desagradaba.
- Estoy con Reich –dijo Alba, a lo que Harry la miró serio y la otra le sostuvo la mirada.
- No es discutible –dijo Zayn, que no paraba de mirar a María.
- Yo hago lo que me sale del mismo –dijo Alba.
- ¿Quieres que te pase lo mismo que a mi hermana? –le preguntó Harry, a lo que María se encogió sobre si misma.
- ¡Eres un bruto! –le dijo Alba abrazando a María. Al cabo de un rato fueron abandonando la habitación, quedándose Zayn y María solos, ella ya se había metido en la cama.
- ¿Seguro que estás bien? –María asintió –puedo quedarme un rato… si quieres –dijo con la boca pequeña, ella se dio la vuelta, le miró y asintió. Zayn se quedó sentando al borde de la cama -¿quieres que te traiga algo? –se ofreció.
- No –habló ella por fin, suspiró y se sentó en la cama como un indio –Zayn…
- Dime.
- Tengo miedo –dijo mirando hacia otro lado.
- No tienes por qué tenerlo, estoy aquí –ella le miró y le dedicó una mini-sonrisa –de verdad María, si necesitas algo…
- Gracias.
- Ya sé que debe de ser muy duro –empezó Zayn –pero… necesito que me digas quien era –ella arrugó la frente.
- No se quien era.
- ¿No te sonaba siquiera?
- Si, si me sonaba… pero no sé de que –tenía la imagen de ese cabrón en la mente pero no tenía ni idea de quien era.
- Descríbemelo –María dudó en decírselo o no, pero sabía que Zayn era de confianza en cierto sentido.
- Tenía el pelo negro, um… era blanquito pero tampoco en plan… en plan Niall, no se –dijo negando con la cabeza –tenía los ojos negros negros, parecían dos pozos sin fondo y un lunar pequeñito al lado de ojo derecho, creo.
- A mi me suena –el lunar ese, se lo había visto a alguien, pero no se acordaba de quien -¡joder! Le conozco, de verdad –se llevó las manos a la cabeza y cerró los ojos con fuerza -¡no le pongo cara! –se estaba estresando.
- Déjalo.
- ¡No, no lo dejo!
- Zayn... lo único que quiero es olvidarlo todo... no quiero acordarme de nada... ha sido, horrible -dijo María llorando, Zayn la miró, ¿cómo podía dolerle tanto el pecho cuando la veía llorar?
- Lo...Lo siento, yo no quería, pero no quiero que se salga con la suya, te juro que como descubra quien era lo mato... lo voy a matar -dijo el chico con rabia.
- ¿Por qué haces esto Zayn? Tu única finalidad es acostarte conmigo... ¿Por qué te comportas así? -preguntó la morena, Zayn empezó a pensar.
- Quizás me intereses más de lo que pensaba... –María se quedo pensando mientras el chico la miraba esperando una reacción por su parte.
- ¿En qué sentido? -preguntó la chica.
- En el de los sentimientos, el que te marca... el corazón -dijo levantándose de la cama dándole un beso en la frente y saliendo de la habitación mientras dejaba a la chica a cuadros... ese era ¿Zayn Malik?
“En la planta de abajo…
Las chicas estaban a punto de salir pero Harry cogió a Alba del brazo y tiró de ella hacia dentro.
- Ven un momento –le dijo.
- ¿Qué? –dijo ella deshaciéndose de su amarre y colocando sus manos sobre las caderas.
- Alba, tienes que tener mucho cuidado –ella asintió –no salgas por ahí sola, y menos de noche, no quiero que te pase lo mismo, así que, cada vez que estés sola por la calle me llamas y así yo puedo ir a buscarte, de esa forma…
- Espera, espera, espera –dijo ella frenándolo con la mano –yo no te quiero de guardaespaldas.
- Me da igual lo que quieras o dejes de querer.
- Ya, pues debería de importarte, porque tú no eres nada mio –contestó ella.
- Alba…
- ¡No! Encárgate de proteger a tu hermana, yo me cuido solita –fue a darse la vuelta hacia la puerta pero Harry la agarró otra vez.
- ¡No seas cabezota!
- ¡¿Qué te importa?! ¡No es tu problema!
- ¡Me da igual lo que digas, no voy a despegarme de tu jodido culo!
- ¡Bueno pues a ver si estás tan pegado a mi culo cuando esté con otro! –se soltó, fue hacia la puerta y cerró de un portazo.
Harry puso sus manos sobe sus caderas y resopló mirando al techo. ¿Pero por qué coño era esta chica tan difícil? Bueno, la pregunta era ¿y a él que cojones le importaba?
“El domingo…
Raquel no paraba quieta en su habitación, iba de un lado a otro, nerviosa perdida ¿Y si Niall no se presentaba? ¿Y si el mamón no venía? O peor, ¿y si venía y le soltaba a su madre que todo era mentira? El timbre sonó y bajó corriendo las escaleras.
- ¡Voy yo, voy yo, voy yo! –pero era tarde, tanto su madre como su hermano ya estaban abriendo la puerta. Apareció Niall con una camisa blanca y unos pantalones negros.
- Buenas noches –dijo sonriendo.
- ¿Niall verdad? –dijo su madre dándole la mano.
- Si ¿y usted la señora Muñoz no?
- No me llames señora por favor –<ya está mi madre con su complejo de adolescente> pensó Raquel –y tutéame –Niall sonrió como respuesta –me llamo Anna –dijo educadamente –y este es Daniel –dijo presentado a su hermano. Anna miró a su hija en la escalera -¿no piensas bajar a saludar? –Raquel bajó rápidamente y se quedó plantada en frente del rubio sin saber que hacer, su madre carraspeó –os esperamos en el salón –cuando desaparecieron por la puerta Raquel suspiró relajando los hombros.
- ¿Alguien está nervioso? –dijo Niall con una media sonrisa.
- No me jodas ahora –contestó ella, miró a todos lados.
- ¿Dónde está tu padre? –Dijo él mirando por encima de su cabeza –es el que más miedo me da.
- Por él ni te preocupes –dijo Raquel con un ligero gesto de dolor en la cara –no le va a importar que estés aquí… a no ser que tengas algo que ver con la bolsa o el dinero -Niall la miró fijamente arrugando el ceño y preguntándose ¿qué le pasaba con su padre? Raquel se dio cuenta y cuadró los hombros -¿qué?
- Rach –dijo su hermano asomando la cabeza por la puerta del comedor –venga que mamá está empezando a ponerse nerviosa –dudó un momento qué hacer y al final agarró la mano de Niall bruscamente.
- Espera, espera –dijo él parándola –parece que me llevas al matadero.
- Eso va a ser peor que el matadero –le aseguró ella.
- Ya bueno, espera –soltó su mano y entrelazó sus dedos con los de ella –así es más creíble.
- Vale, vale, tira –echaron a andar y entraron al salón, se sentaron en uno de los sillones. Su madre empezó a preguntarle cosas al rubio y Raquel dejó de prestar atención, él sonreía y contestaba amablemente, exactamente como haría un chico modelo, por eso a su madre le encantó. Estaba sopesando la posibilidad que tendría de escapar de allí cuando su madre captó su atención.
- ¿Desde cuándo os conocéis? –Niall y Raquel se miraron.
- Eeeh, cuatro meses –dijo ella automáticamente, Niall la sonrió como el perfecto enamorado que pretendía aparentar y su madre siguió hablando.
- Raquel, al final no vamos a cenar –ella se giró hacia su madre.
- ¿Cómo?
- Si, tu padre no puede venir, tenemos un compromiso en casa de su jefe.
- Vamos que teneis otra mierda de fiesta –estaba cabreada.
- ¡Raquel! –La reprendió su madre -¡no hables así! –dijo mirando a Niall y disculpándose con la mirada.
- ¡Me la suda! ¿Te gusta este lenguaje? –dijo soltando a Niall y levantándose -¡puedes meterte todas tus apariencias por…
- ¡Suficiente! –le dijo su madre, ella la miró con todo el odio del mundo y se fue a su habitación, cerrando de un portazo. A los pocos minutos se abrió la puerta.
- ¡Mamá que te… -se dio la vuelta y se calló al ver al rubio en la entrada –oh se me olvidaba que tú estabas aquí –dijo resoplando.
- Vaya gracias –contestó el otro irónico -¿estás bien?
- Mira déjame ¿vale? Ni siquiera tendría que haberte invitado… es que eres tonta Raquel –dijo dándose un golpe en la cabeza con la palma de la mano.
- ¿Por qué me desprecias tanto eeh? ¿Qué cojones te he hecho yo?
- No tengo ganas de hablarte.
- Pues yo si –se acercó hasta la ventana done estaba ella.
- ¡Déjame! –cuando estaba a punto de alcanzarla ella abrió la ventana y salió. Niall se asomó corriendo pensando que había saltado -¿qué creías que me suicidaría por ti? –Dijo Raquel asomando la cabeza por un lateral -¡que flipado! –Dijo escalando el resto de la casa, porque no estaba muy inclinada y hasta había una parte llana al lado de su ventana, Niall lo sopesó un momento pero al final la siguió, cuando le quedaba un trozo, Raquel cogió su mano y tiró -¡vamos lentorro! –al final se sentó al lado de ella.
- Eres como una cabra, pero en vez de montes escalas casas…
- ¿Cómo crees tú que salgo de casa sin que mis padres, bueno mi madre, se entere? Me convierto en Catwoman y ala –Niall se rio ante su comentario –mira si hasta te sabes reír y todo.
- A ver si aprendes tú.
- Yo me rio todo el rato, pero no contigo.
- Eres exasperante…
- Y tú un buenazo machista.
- ¿Machista?
- Si, te aprovechas de la animadora esa haciéndola creer que te importa y luego la dejas tirada –Niall rio sarcástico.
- ¿Y me lo dices tú? –preguntó indignado.
- Yo no hago creer a nadie lo que no es.
- Que mentirosa…
- ¿Perdón?
- Raquel los dos sabemos lo que pasa aquí –ella le miró con una ceja levantada –tú me haces creer que te importo una mierda cuando en realidad te mueres por besarme –ella agachó la cabeza y miró para otro lado -¿no dices nada? –preguntó sonriente, Raquel se giró y le miró tímida, cogió su mano.
- Niall… estoy harta… -susurró –no quiero fingir más –pasó su mano a la cara de este y se acercó, Niall cerró los ojos y Raquel se acercó un poco más, pero antes de que sus labios rozaran los suyos, le dio dos palmaditas en la mejilla –ay pequeñín… que poquito me conoces –él se puso rojo de rabia, la había engañado la cabrona.
- Que zorra mala eres –se levantó y al llegar al borde se quedó parado pensando que hacer.
-  Mira –dijo ella llegando a su lado, se colgó del canalón y se soltó, él hizo lo mismo y aterrizó en el suelo sano y salvo –que desastre –ella se empezó a reír –no te salen bien ni las huidas.
- Déjame…
- Venga que te llevo –subieron al coche y no se dijeron ni una sola palabra por el camino, antes de salir Niall habló.
- Por cierto, mañana bueno… ya sabéis que después de lo de María vamos a estar pegados a vosotras.
- Oh… serás mi guardaespaldas personal… -se quedó pensativa –te podré llamar a cualquier hora y hacer lo que quiera ¿no? –Niall apretó la mandíbula.
- A lo mejor soy yo el que se aprovecha de la situación –Raquel rio.
- Los niños buenos no hacen esas cosas.
- Que te den –dijo saliendo.
- ¡Y que disfrute! –le gritó ella.

5 comentarios:

  1. kljalfksjdfl que se me olvidaba que tenia cuentaaaaa!! Joder que perfeccion de capitulo!! los sentimientos de los chicos se ven a la legua eh! chicaaas darles un poco de treguaa!! jajaja
    Siguienteeeeeee cielooos <3

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  2. Sdfgh yo veo que van a acabar todos enchochados hasta las trancas sdfgh ME ENCANTA siguiente prontito ¿okaysi?

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  3. Siguiente pronto porfavor es my hdndkfigkjfbdjd!!

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  4. DIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOS TUS CAPITULOS ME ENCANTAN !
    ZAAAAAAAAAAAYN Y MARIAA <3 SIGUIENTE PORFA PORFA PORFA PORFA PORFA!!

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